Atlas del Sur del Lago
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PRESENTACIÓN
María Malpica
María Malpica
Desde mi desempeño como docente, concebí la idea de elaborar un Atlas para el municipio Colón, no un atlas como recuento de cifras y estadísticas que aún cuando posea un valor documental y bibliográfico, muy poco deja en el lector común.
Me propuse un Atlas contentivo de nuestra historia, de la biodiversidad que caracteriza a nuestro municipio, de nuestras potencialidades en el área agrícola-pecuaria, nuestras riquezas faunísticas y florísticas, nuestras condiciones acuíferas, nuestras grandes fortalezas ecoturísticas que constituyen nuestro potencial económico y sobre todo, nuestras inmensas reservas humanas. Un Atlas que se convierta en libro de consulta para maestros, profesores, educadores y educandos en su proceso de enseñanza-aprendizaje y que además sea de utilidad para la comunidad en su conocimiento de su entorno y potencialidades, en el reconocimiento de nuestro sentido de pertinencia.
Un Atlas con sabor a pueblo que incluya desde sus grandes potencialidades socioeconómicas hasta sus específicas construcciones simbólicas, que contenga desde sus primeras historias hasta su particular gastronomía, que pueda ser empleado como texto básico en nuestras instituciones educativas, siguiendo el precepto de que sólo se ama aquello cuanto se conoce. Un texto que con el paso de los años pueda ser enriquecido por las nuevas generaciones y los nuevos conocimientos y nociones que depare la ciencia.
Hoy tenemos con nosotros un Atlas que compendia ese pasado e historia común, esas grandes potencialidades que Dios y la naturaleza nos otorgaron, desglosados en un lenguaje accesible y ameno y no menos profundo, que nos proporciona identidad y nos define como pueblo. Narraciones y gráficas, interpretaciones y mapas, poemáticas y leyendas, van construyendo el municipio Colón desde las más diversas perspectivas. Investigadores, cronistas, periodistas, personajes, artesanos, artistas, poetas y cantautores, fotógrafos, campesinos y amas de casa, han contribuido a la elaboración de esta obra, cuya investigación, observación y oficio, nos devela al municipio Colón por dentro, una mirada a esa Venezuela que se levanta cada día en el afán de construir su propia historia. Una mirada múltiple a esa Venezuela rural que puntualiza en el trabajo colectivo, los grandes retos del país. Uno de los 21 Municipio del municipios del estado Zulia que contribuye a enriquecer nuestro país y que juntos en sus más diversas expresiones y particularidades conforman nuestra zulianidad.
Hoy el municipio Colón es un vivo ejemplo de todo cuanto unidos por una causa noble y común podemos hacer y no hay causa más noble y común que la de proporcionar la mayor suma de felicidad a nuestro pueblo como pautaba el Libertador. Hoy el legado de nuestro comandante supremo Hugo Chávez, es una enseñanza viva de cuanto podemos hacer, de cuanto podemos llegar a ser. Continuar con su enseñanza, seguir unidos en el esfuerzo por construir la patria noble y buena y hacer esfuerzos por resolver y solventar cuanto haya que enmendar y corregir para enrumbar definitivamente nuestra patria bajo el ideario bolivariano de justicia e igualdad social, es desde nuestra Alcaldía nuestra humilde contribución.
Gracias a los colaboradores que participaron con tanto denuedo e interés y gracias especialmente a nuestro escritor y poeta Alexis Fernández, oriundo de este municipio, del kilómetro 18, de la línea férrea Santa Barbará-El Vigía, como se enorgullece en señalar por ser el compilador, prologuista y curador de la presente edición.
De la mano de nuestro gobernador Francisco Javier Arias Cárdenas, bajo las directrices del gobierno nacional, presidido por Nicolás Maduro Moro y las propuestas de nuestra comunidad, el compromiso es llevar adelante el destino inexorable de nuestra patria, la patria que soñó nuestro Libertador Simón Bolívar.
A
manera de Prólogo
Esa exuberancia
que raya en los límites de lo imposible
Alexis
Fernández
He
escuchado con frecuencia y he leído en forma reiterada la expresión imprecisa,
gastada y arrebatada por un dejo de nostalgia y en muchos casos de
indiferencia, cuando de referir el origen de uno de nuestros coterráneos se
trata, la siguiente acotación: “…él es del Sur del lago”, “…él es del remoto
Sur del Lago”, “…eso queda muy lejos, hacia el Sur del Lago” “…ellos se fueron
muy lejos, imagínate se fueron para Santa Bárbara”. “Andan para Colón…y eso si
queda lejos, eso queda donde se regresa el viento” “… ¿San Carlos de Zulia…?
como que queda cerca de Santa Bárbara…en el Zulia, qué sé yo”. En otras
ocasiones, por contrapartida a ese eco distanciador e indiferente, se
contrapone la visión idealizada de un pasado pletórico en abundancias, “La
despensa verde de Venezuela”, “De Zulia son los mejores plátanos y el mejor
queso…las mejores carnes…”, “Santa Bárbara, esta zona se hunde en riquezas, tu
lanzas una moneda a las riberas del río y nace una mata de plátanos…te devuelve
un racimo de plátanos con queso rallado y todo…aquí los crotos son árboles
gigantescos…la carne, el mejor lomito del mundo…el pescado, el mejor pescado de
agua dulce…” son expresiones pautadas al calor de una abundancia que ha
permitido el enriquecimiento de unos pocos en detrimento de la gran mayoría
trabajadora.
Apartamiento acunado desde el centro
hacia la periferia, en una clara manifestación etnocentrista, alejamiento
espacio–temporal idealizado como categoría fija, invariable, que segrega y
condiciona las potencialidades que posee esta zona conocida como sur del
lago, municipio Colón. Sólo 470 km. vía terrestre, 25 minutos por vía
aérea de la Capital del estado, 1 hora y 15 minutos desde la Capital del país
(esperando se restituya esa anhelada como ansiada línea aérea).
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